Lo que da una (nuestra) biografía: el Destino (sí,  existe): aquello que no elegimos, la Libertad: lo que hacemos con lo que nos ha sido dado, el Azar: lo inesperado que se nos aparece

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Contra el anti- modernismo de la vanguardia, reivindicó el realismo como categoría estética (no algunas de sus manifestaciones), que “organiza artificialmente el espacio y el tiempo donde se ubica la acción. Del caos de sensaciones que le transmite el mundo exterior, el artista buscando la esencia detrás de la confusión de apariencias, selecciona, jerarquiza, abstrae, simplifica, esquematiza, estiliza, tipifica, deforma; elige un ángulo, y desecha otro, presenta un escorzo distinto, recorta el fondo, aísla algunos elementos y deja otros en la oscuridad. El estilo es un procedimiento, una construcción mental, un artilugio, una retórica, un código, un sistema de signos y símbolos que le permiten al artista reducir la realidad informe a una unidad coherente, a una síntesis … Al fin, las formas humanas son más variadas y más ricas que las geométricas, las combinaciones que se pueden hacer con éstas se agotan muy rápidamente … El cuadro no puede reducirse al tema, pero éste no es del todo indiferente. El tema está relacionado con el espíritu del tiempo”

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Sobre la amistad y la admiración y un reencuentro tras rivalidades y distancias: una dedicatoria a Vargas Llosa: “Tantos años sin saber que éramos amigos”