A partir de

Yacaré, de Luis Sepúlveda

El chileno Dany Contreras, por encargo de George Zoller, su superior en el grupo de investigadores privados de la compañía Seguros Helvética, se lanza a intentar establecer si la muerte de don Vittorio Brunni fue por causa natural o no. De eso dependía el pago de un millonario seguro a Manai.

Nadie sabía quién era. Ni nadie entendía por qué un seguro tan alto.

A don Vittorio un arranque de conciencia –y de miedo- lo había llevado a contratar ese seguro.

Es que Marroquinerías Brunni había arrasado con los yacarés del Mato Grosso, y también con la tribu anaré, para fabricar sus productos.

Unos muertos de la compañía al tiempo; la explicación sobre el poder de un brujo, llevó entonces a que “el gran Vittorio Brunni trató de comprar su vida con ese seguro a nombre de Manai, pero el brujo no se dejó sobornar”.

¿Había realmente un brujo? Había, seguro, vengadores de aquel exterminio. Que iban consumando su venganza.

Los vengadores fueron atrapados, enfermos, agonizantes hasta morir. “Allí quedó el último de los anaré, triste, con la tristeza de los que no tienen retorno; solitario, con la soledad de los derrotados; y al final de un sendero por el que nunca debió transitar”.

Hay triunfos con sabor a derrota, amarga incluso, hasta irreversible. Pero, ¿dejan de ser triunfos?